Cuando tenía 15 años, uno de los primeros libros que leí fue: “Famosos casos de Estafa y Pillaje” del Reader´s Digest. Recuerdo que disfruté mucho de la increíble creatividad que utilizan los defraudadores para quitarle su dinero a “los ingenuos”. Recuerdo que «aprendí» que el fundamento para el fraude era que se ofrecían en todos los casos productos o servicios a precios completamente irreales. La gente, ambiciosa, caíamos una y otra vez.

En estos nuevos tiempos, han aparecido «jaurías de chacales» que intentan defraudar a quién se deje. Mas que meterme en una meditación ética o política o social, en donde levante un dedo acusador al sistema, a la educación de las familias o a uno mismo, lo que quiero es que tengamos cuidado.

En el negocio de viajes y tiempos compartidos han surgido varias de estas jaurías que contactan a los usuarios, propietarios y demás y les ofrecen propuestas jugosas e interesantes. Precios muy bajos en hospedaje o paquetes vacacionales. Compra a precios muy altos de sus membresía (aunque estén canceladas) y cuanta cosa inventen conforme se vuelven mas creativos. Usan plataformas virtuales y engañan al público ingenuo y ambicioso. Rentan números telefónicos, direcciones de internet y copian porciones de las páginas reales. Sus representantes telefónicos están muy entrenados en sicología y sin ningún empacho te van llevando hasta lograr un depósito o una transferencia.

La base o fundamento de los fraudes es la ambición. Comprar algo a precios ridículos o muy baratos o que “te compren” algo a un precio mucho mas alto que lo normal. El famoso fraude de Nigeria en donde contactaban a las compañías mexicanas y les ofrecían jugosos contratos. Sólo se necesitaba un anticipo, un regalo para sus autoridades o algo “mínimo” comparado con lo que ofrecían.

Oferta : En la compañía nos ofrecieron esta semana unas televisiones de 80 pulgadas a un precio inferior a los 15,000 pesos que venían “de un proveedor conocido”.

Realidad:  No era el proveedor de siempre, La página era similar y nos defraudaron el monto de 5 televisiones. Lo que parecía muy bueno para ser cierto, en efecto lo era. Nos sorprendieron y aún no he aprendido la lección.

Oferta: Un querido amigo recibió la propuesta de un paquete para 5 noches en Cancún para Xcaret a un precio bajo, pudiendo utilizarlo en cualquier época del año. La página contaba con premios del proveedor, registros y demás que daban credibilidad.

Realidad: Pagó y nunca volvió ver su dinero.

Oferta: Paga tu renovación de visa para los Estados Unidos en OXXO.

Realidad:  Es una página pirata que solo se queda con tu dinero. No es la página oficial de la Embajada.

Hoy leía que en los EUA, los fraudes se han destapado de manera increíble y que las autoridades judiciales cibernéticas no se dan abasto con dicho incremento.

Les pido que estén pendientes ya que «hay bandera roja» en cuanto a fraudes cibernéticos y telefónicos. Ojo, mucho ojo y se vale «rebotar» las ofertas con otros y verificar detenidamente y no pagar si no se recibe el producto. Recuerda que no hay prisa. Si te parece que es muy bueno para ser realidad, seguramente es porque lo es. Atrás hay alguién – o varios – esperando quedarse con tu dinero.

Abrazo fuerte amigos.

Jorge Oca