Después de 50 años de una vida intensa, estoy aprendiendo a aprender. Y estos aprendizajes personales podrían ser de utilidad para algún lector. He sido afortunado en vivir dentro de una familia amorosa, un trabajo apasionante, una religión que me reclama como hijo amado y muchos amigos muy queridos. En estas reflexiones espero compartir aprendizajes que me generen valor a mí y a los demás.