El vendedor había sido el mejor del equipo de ventas durante los últimos 8 años.  La diferencia entre él y los demás era notoria. Hacía muy bien su trabajo.

Tenía varios talentos muy especiales. Un carácter muy afable que le gustaba mucho a los clientes. Una mente ágil que le permitía manejar números y situaciones. Era además generoso, detallista y muy sensible. Por supuesto que ambicioso y muy competitivo. Los demás lo apreciaban, reconocían, pero sobretodo lo admiraban. Les ayudaba mucho; así que todos querían estar cerca de él.

Además de todo, el Top Closer es grandote. Podrías llegar a decir que es gordo.

Imaginémonos por un instante que este gran tipo fuese por la vida solo pensando en que estaba gordo. Y para ponerle énfasis al tema; que pensara que estaba hecho un CERDO. Ya enfocados en esto, imaginemos que él pensara en que todos pensaran básicamente que él es un CERDO.

Y bueno, es un hecho que uno de sus tantos atributos es que no está flaco. Pero realmente lo que lo define son todos sus atributos (los positivos y también los negativos).

Ese conjunto define lo que él es. Así es él. Hay que partir pues de aceptar y enamorarse uno del paquete. Porque todo el paquete es lo que lo define a uno mismo. Las cosas brillantes y las no tan  brillantes.

Creo que algunos pasamos y le dedicamos demasiado tiempo a concentrarnos en la – o las partes – que no son necesariamente nuestras partes notables y brillantes. Olvidándonos de tantas cosas positivas.

Nadie piensa en el mentado top closer como “el cerdo aquel”. Sino en que es un gran hombre que ha logrado destacar como pocos en ventas. Alguien que disfruta “demasiado” de la vida. Tanto que es un verdadero sibarita; come y bebe como los meros buenos. ¡Qué desperdicio sería el que el Top Closer solo se enfocara y pensara en «su parte cerda»!

Creo que debemos aceptar a “nuestro cerdo interno”. Eso que no necesariamente es tu mero talento o característica positiva, pero que te conforma también como lo que eres.

Sin duda que el aceptarte como eres, te llevará a ser más feliz, a desempeñarte mejor y en una de esas a mejorar los temas que te animes a mejorar.

Te invito a que vayas al espejo y no dejes de ver esas partes tan maravillosas que tienes. Esa gran persona que eres. Ese ser humano tan especial que existe.

Ya es tiempo que te veas como el conjunto maravilloso que eres y no solo te concentres en “esa parte cerda” que por cierto termina de darte el toque de lo que eres. Alguien muy especial.

• Enamórate de todas tus cosas buenas y también de las malas.
• Deja de concentrarte sólo en tus partes malas.
• Que te valga ya sabes que lo que la gente piense. De todas formas te van a criticar.
• El único que importa lo que piense de ti eres tú.

Te mando un fuerte abrazo.

Jorge Ocaranza Freyria