Gerardo Kuhlman nos hizo favor de dar una sesión dentro del programa del Diplomado de la Grandeza sobre la Gratitud. Nos llevó desde la etimología de la palabra, que es gracia y gratuidad hasta llevarnos a los increíbles beneficios de ser agradecido.
Decenas de estudios médicos que afirman que la gratitud ayuda desde a dormir bien hasta a curar la depresión. El tema es entonces, ¿porqué es tan poderosa la dichosa gratitud? Me acordé del Dr. John Dizpensa, de como todo inicia en un pensamiento y como los pensamientos generan emociones y sentimientos y que el cuerpo genera siempre químicos asociados a estos sentimientos. Si los pensamientos son negativos, de preocupación, estrés, miedo y demás, entonces los químicos secretados nos afectan físicamente. A la larga y no tan larga, estos químicos nos enferman irremediablemente. Muchas personas pasan desde depresiones ligeras hasta cánceres y enfermedades crónicas que normalmente no terminan bien.
Gerardo nos recomendó, al igual que Luis Topete a llevar un diario de gratitud. En esta libreta, normalmente guardada en el buró, junto a nuestras camas, el tema es escribir al menos tres agradecimientos antes de acostarse y ya encarrilado, tres al despertar. Este hábito es uno de los mejores que podamos adquirir. Yo tengo el hábito de hacerlo, aunque no necesariamente con mucha constancia. Ahora entiendo que “la magia” son los químicos positivos que secreta nuestra cuerpo al tener este tipo de pensamientos que generan los sentimientos positivos. Son los químicos que nos generan salud interna, salud mental y física. Son químicos que combaten a las hormonas de estrés que muchos de nosotros tenemos en niveles muy elevados.

Joe Dizpensa dice que somos los únicos animales que podemos producir estas hormonas de estrés con sólo pensar.
Me queda claro que tenemos que ser muy buenos administradores de nuestra “fábrica interna de químicos”, la cual se encuentra alojada justamente en el centro de nuestro cerebro. El tercer cerebro según JD.
Otra vez nuestra mente, que al parecer nos controla y nos hace vivir en el pasado o en el futuro en lugar de que nos sirva y vivamos en el presente.

¿Como anda tu «farmacéutica interna»?
¿Generas chorros y chorros de químicos negativos todos los días?
¿No estarán esos químicos enfermándote?
¿Qué estás haciendo para combatirlos?
¿Ejercicio?
¿Meditación?
¿Oración?
¿Tu diario de Agradecimiento?
¡Que tengas una gran semana!
Jorge Ocaranza Freyria