Después de más de 5 horas de pedalear en la carrera de bicis, el final se aproximaba. Estaba adolorido, cansado pero muy contento de que se aproximaba la meta. Había gente que echaba porras en el camino y una de ellas me gritó: “No te rindas!!”.
Me causo muchos sentimientos el comentario.
Para empezar risa. ¿Rendirme? !Pero si había entrenado varios meses y faltaba ya casi nada para terminar¡ ¿A quien podría ocurrírsele siquiera pensar en rendirse?
En estas carreras, como en otras, el solo pensar en la posibilidad de no terminar o darte por vencido puede abrir puertas que nunca quieres atravesar.
La mente es muy poderosa y funciona tanto para lo positivo como para lo negativo. Hay que tener mucho cuidado.
Cuando estás enfocado en terminar y lograr tu objetivo, no puedes perder tiempo o energías en nada que no sea terminar lo que te propusiste. Como para que ?
No darte por vencido – y terminar bien lo que te propusiste – puede ser un hábito que tengamos desde pequeños y sigamos constantes durante la vida.
Durante “nuestras carreras” pueden haber efectos secundarios de dolor, molestia, angustia o simplemente pérdida de interés . Es ahí cuando tenemos que permanecer enfocados. Y sobre todo determinados.
En la carrera me tocó ir junto a un ciclista que tenía una pierna de metal. Vaya que rendirse no estaba en su vocabulario. Hay mucha gente que se ha vuelto resiliente ante la adversidad y el rendirse no es opción.
Hay ocasiones en nuestras vidas que se nos juntan los temas y el “rendirómetro” empieza a dar lata. Resiste, respira y aguanta.
No dejes de hacer tu tarea y de cumplir como corresponde.
Recuerda que El Patrón está contigo y también qué hay gente próxima a ti que esta por rendirse y tu ayuda puede cambiarle la vida.
No te rindas y ayuda a que los demás no se rindan.
Vamos equipo!!
JOF
Chucho Martí
👏 🚴🚴🏻♀️👍
Me gustaMe gusta
JP
Muy bueno Jorge! Ahí es donde se conocen las personas admirables!
Me gustaMe gusta